El sendero de San Martín de Don se introduce de pleno en el monte de utlidad pública que recibe el nombre de El Pinar, aunque se puede afirmar categorícamente que no es sólo pinar lo que el monte contiene.

La variedad forestal es tan amplia que se podría ver este lugar como uno de los más privilegiados, en este sentido, de todo el Parque Natural de Montes Obarenes. A la presencia impresionante de pino silvestre es preciso añadir la de importantes masas de hayedos y robledales que confieren al monte un aspecto endiabladamente salvaje.

Todo ello está presidido por imponentes antiles rocosos donde anidan diversas rapaces que requieren de nuestra colaboración para su supervivencia: caminar en silencio, sin alterar la paz que se respira en el ambiente, es la mejor opción y, además, probablemente nos permitirá observar alguno de los numerosos mamíferos que por aquí pululan a sus anchas; especialmente el corzo.

5 claves para no perderse:

1. Salida desde San Martín de Don a través de la calle de la Fuente que continúa por una pista forestal flanqueada de almendros.

2. Después de un largo trecho por la pista forestal, en una pronunciada curva, es preciso abandonarla por su derecha e internarse en el Gran Cañón.

3. La senda sale de nuevo a la pista de la variante. Por la izquierda se inicia el regreso hacia el pueblo. Por la derecha continúa par ahacer el recorrido.

4. En un cruce entre vallas de repoblación es preciso tomar la pista que asciende por la derecha. Límite con Álava.

5. Junto a un área recreativa instalada por la Jutna de Castilla y León confluye el PR y su variante. Atención al sentido de la marcha.